Hace dos años, Eliana y Sneider, junto a su pequeña hija Camila- de un año-, recorrieron 115 kilómetros desde Maraicabo (Venezuela) hasta Paraguachón -corregimiento fronterizo del municipio de Maicao (Colombia)-, con la ilusión de un mejor futuro. Tras su arribo, la familia fue acogida por la tía materna de Eliana, en un rancho artesanal del barrio El Renacer.
Al instalarse con su familia en Paraguachón, Eliana -quien pertenece a la etnia indígena Wayúu-, se percató de que estaba en embarazo. Y, aunque estaban dichosos por la noticia, Eliana y Sneider sentían angustia porque no contaban con los recursos económicos para el proceso de cuidado de ella y del nuevo miembro de su familia.
Poco después, al conocer su estado, Nubia Berdugo -una lideresa de la comunidad- le recomendó a Eliana acercarse al puesto de salud del corregimiento porque allí podría recibir una atención en salud materna sensible a la migración y a la diversidad étnica y cultural, propia del territorio guajiro.
“Le dije a mi pareja que me acompañara al puesto de salud a ver si contábamos con la suerte de que nos ayudaran para saber si mi bebé se encontraba en buenas condiciones. […] Al llegar, fue muy bonito encontrarnos con personas dispuestas a apoyarnos en todo mi proceso de embarazo. El personal me brindó atención médica y, a través de un ecograma, nos informaron que tenía cuatro meses de embarazo y que en poco tiempo mi bebe nacería”, comenta Eliana.
Con el propósito fortalecer la atención en salud de la población nacional venezolana, los colombianos retornados y las comunidades de acogida, desde el Programa de Estabilización Comunitaria (CSA) de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se priorizó la intervención del puesto de Salud de Paraguachón en La Guajira con fin de fortalecer la atención diferencial.
Durante el mes de junio hasta diciembre de 2020, se llevó a cabo la adecuación de consultorios y espacios comunes, con la señalización de los servicios en español y Wayuunaiki -lengua de la comunidad indígena Wayúu-.
Así mismo, para el fortalecimiento de los procesos de atención en salud por medicina general, enfermería, salud oral, vacunación, control prenatal, y control de crecimiento y desarrollo para niñas y niños, se entregó la dotación de insumos y equipos biomédicos y se apoyó el mejoramiento de las capacidades del talento humano en salud en procesos de atención a través de capacitaciones sensibles a la situación de migración, al enfoque diferencial con énfasis en género y étnico. Acciones que continuarán durante el año 2021.
Con la ampliación del horario de atención por medicina general y enfermería, para contar con servicios de 8 horas diarias de lunes a sábado, desde junio hasta diciembre de 2020, el Puesto de Salud de Paraguachón logró la atención en salud de 1.572 personas- 1.185 mujeres y 387 hombres- quienes accedieron a 1.843 servicios de salud. El 95% de la población atendida corresponde a población refugiada y migrante proveniente de Venezuela.
Durante su proceso de gestación, Eliana recibió un acompañamiento constante del personal del Puesto de Paraguachón para examinar su salud y la del bebé. Por eso, para cuando llegara el día del parto, había planeado asistir al puesto de salud para que, desde allí, pudiera ser trasladada al Hospital San José de Maicao en ambulancia. Sin embargo, cuando llegó, la médica y el enfermero se dieron cuenta de inmediato que el bebé estaba a punto de nacer y que ya era demasiado tarde para ir al hospital que se encuentra a 35 minutos.
“Tuve a mi bebé en el puesto de salud. Aunque, no era lo que esperábamos porque debió nacer en el hospital, la atención que me brindaron fue buena, no nos faltó nada. De allí nos llevaron al Hospital San José de Maicao en la ambulancia”- dijo Eliana.
En 2020, gracias al fortalecimiento de este puesto de salud - por medio de la disposición de espacios de servicios de salud materna y prenatal-, se atendieron 10 partos de nacionales venezolanas que ingresaron en periodo de trabajo de parto. Entre esos, el de Eliana.
Hoy en día Ángel tiene ocho meses, y le encanta jugar con su hermana Camila de tres años. Para Eliana y Sneider, sus hijos sean han convertido en el motor de su vida, por eso sienten un inmenso agradecimiento con el personal que les brindó atención médica, información y apoyo psicosocial durante este importante periodo de sus vidas.
“No dejo de contar todo lo que viví. Todo el acompañamiento físico y mental durante toda mi gestación. Estoy muy agradecida de la atención en el puesto de salud porque gracias a ellos [al personal] un ángel llego a mi vida”, expresa Eliana.
El dato.
Con el propósito de fortalecer la atención en salud con enfoque diferencial en zonas de altos flujos migratorios, el Programa de Estabilización Comunitaria (CSA) de USAID implementado por OIM, también ha venido mejorando las capacidades técnicas de seis puestos de salud de los hospitales públicos ubicados en los departamentos de La Guajira, Atlántico, Cesar, Norte de Santander y Santander desde el 2020 continuando con las acciones durante este año 2021.
