En el mes de marzo, la comunidad del resguardo indígena Awa de Nulpe Medio recibió una dotación de equipos tecnológicos; electrodomésticos; y elementos de alojamiento y aseo para su albergue temporal en el municipio de Ricaurte, en Nariño. Con una capacidad para 50 personas, la casa de paso es una medida para reducir la vulnerabilidad y mitigar las afectaciones sufridas por esa comunidad indígena como consecuencia de la violencia y el desplazamiento forzado. La acción también busca contribuir a la protección de los líderes, lideresas y defensores de derechos humanos de ese pueblo indígena, cuyo resguardo agrupa 3.097 personas.

La situación compleja de orden público en ese territorio, ha afectado a esta comunidad indígena registrando eventos de desplazamiento forzado, despojo de tierras, reclutamiento de menores de edad, entre otros hechos de violencia.

Por eso, la Unidad para las Víctimas, la Agencia de Renovación del Territorio, la Alcaldía de Ricaurte y el Comité Territorial de Justicia Transicional, junto a la Unidad Indígena del Pueblo Awa-UNIPA, priorizaron la entrega de medidas de asistencia, prevención, protección, y no-repetición. Una de estas fue la construcción y dotación de este albergue comunitario. El albergue, construido en un predio de pertenencia de la comunidad indígena, fue entregado en noviembre de 2020. La entrega de esta medida de infraestructura social y comunitaria también hace parte del Plan de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) de Ricaurte, Nariño.

Para Feliciano Urbano, gobernador indígena, esta casa beneficiará a todo su pueblo el cual ya tendrá un espacio donde ser recibido: “una casa para todos”, según él la denomina. 

La entrega llevada a cabo por el Programa de Fortalecimiento Institucional a Víctimas (VISP) de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se realizó en el marco del apoyo brindado al gobierno nacional y territorial para fortalecer la implementación de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET). Esta entrega se realizó dando alcance a la iniciativa PDET: “Diseñar e implementar una ruta de protección y acompañamiento con enfoque territorial para líderes, lideresas y defensores de derechos humanos del Municipio de Ricaurte, Nariño…”.

El acompañamiento del Programa VISP, propende por la armonización y articulación de la política pública de atención y reparación a víctimas con la política de estabilización territorial. La entrega incluyó, entre otros elementos, equipos de cómputo e impresión, una nevera, mobiliario, kits de alojamiento, equipos de cocina y limpieza, colchonetas, escritorio, lavadora, armario, botiquín y camilla.El Programa VISP actualmente ha identificado 34 medidas de reparación que contribuyen a 29 iniciativas PDET (ubicadas en 7 subregiones). Las medidas, que han sido validadas con la Unidad para las Víctimas, se relacionan con temas como: procesos de memoria histórica, construcción de estrategias de comunicación, fortalecimiento a organizaciones étnicas y de mujeres, e iniciativas de patrimonio entre otras. Las medidas se encuentran en proceso de caracterización y formulación para su posterior priorización e implementación. Así mismo, el Programa ya ha apoyado la implementación de 13 iniciativas de reparación que aportan a los PDET.

El acto de entrega contó con la asistencia de Gilmar Eder Burgos, Alcalde Municipal de Ricaurte; Feliciano Urbano, Gobernador Indígena; Eugenio Estupiñán, Gerente de PDET de la Agencia de Renovación del Territorio; y de William Pinzón, Director Territorial de la Unidad para las Víctimas en Nariño.