La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) avanza en la entrega de transferencias monetarias multipropósito a la población refugiada y migrante proveniente de Venezuela, colombianos retornados y de comunidades de acogida en tres departamentos del país para facilitar el acceso a alimentos, agua, alojamiento y otros servicios básicos en medio de la coyuntura generada por la pandemia COVID-19. En el corte entre julio y septiembre se logró superar la meta inicial llegando a 4.070 personas.

Estas transferencias multipropósito se realizan por la OIM como parte de la implementación del proyecto Ciudades Incluyentes, Comunidades Solidarias, financiado por la Unión Europea y en el que, además, participan el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU Hábitat).

Con el apoyo del socio implementador Acción Contra el Hambre, la OIM ha llegado, entre julio y septiembre de 2020, con las transferencias multipropósito se han alcanzado a 1.059 hogares en las cuatro ciudades priorizadas por el proyecto: Cúcuta y Villa del Rosario (Norte de Santander), Bucaramanga (Santander) y Barranquilla (Atlántico). Se trata de un apoyo para hogares con alto grado de vulnerabilidad, que prioriza y analiza aspectos como ingresos limitados, riesgos de violencias basadas en género, hogares con madres o jóvenes cabeza de hogar, inseguridad alimentaria, entre otros.

Estas transferencias multipropósito reconocen la autonomía y responsabilidad de los beneficiarios para decidir sobre las soluciones a sus necesidades básicas, dignificando su situación y contribuyendo a su protección, al tiempo que facilitan procesos de integración e inserción social de refugiados y migrantes en las comunidades de acogida de los territorios a los que llegan.

La implementación de las transferencias monetarias se realiza en articulación con las autoridades nacionales, departamentales y municipales, que han apoyado el proceso de identificación de población beneficiaria, pues suelen ser uno de los primeros contactos a los que acuden los refugiados y migrantes provenientes de Venezuela y personas de las comunidades de acogida.

“Vinieron hasta acá, me dieron el beneficio de la tarjeta con la transferencia. Eso nos ayudó muchísimo porque con la pandemia todo se descontroló. Con eso pagamos todo incluyendo los servicios”, asegura Azucena, integrante de una de las familias beneficiarias de estas entregas que continuarán implementándose hasta diciembre de este año.

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Sobre el proyecto Ciudades Incluyentes, Comunidades Solidarias

Ciudades Incluyentes, Comunidades Solidarias es una iniciativa regional financiada por la Unión Europea que busca aunar esfuerzos entre OIM, ACNUR y ONU Hábitat para reducir las vulnerabilidades de los migrantes y refugiados provenientes de Venezuela, y abordar el impacto en las comunidades de acogida para diseñar soluciones estables y duraderas a mediano y largo plazo en cuatro países de América Latina: Colombia, Perú, Ecuador y República Dominicana.

El proyecto le apuesta, entre otros aspectos, al fortalecimiento de los gobiernos locales para que estén mejor informados y preparados en el manejo de grupos de refugiados y migrantes provenientes de Venezuela, así como para responder a las necesidades y desafíos específicos de cada territorio. Adicionalmente, el proyecto busca promover la cohesión social y prevención del conflicto entre las comunidades receptoras y la población de refugiados y migrantes de Venezuela, al igual que la difusión de buenas prácticas en la región dirigidas a ciudades e interesados fuera del núcleo seleccionado para este proyecto, fomentando una comunidad más amplia de práctica y solidaridad.