Comunicado
Local

Gaceta de Paz 23-29 Enero 2019

Gaceta de Paz 23-29 Enero 2019

Actualización semanal sobre los hechos más importantes relacionados con la implementación del Acuerdo. Esta semana la Gaceta de Paz está relacionada con un especial sobre el nuevo escenario de “posconflicto” que se empieza a vislumbrar a partir de la ruptura de las negociaciones con el ELN; el balance de la implementación del Acuerdo de Paz realizado por el jefe de la Misión de la ONU en Colombia; el avance de procesos complejos en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP); la entrevista con Iván Márquez sobre su posición frente al estado actual del proceso de paz; entre otros.

Lea y descargue Gaceta de paz 23-29 Enero 2019

Si quiere consultar el histórico de publicaciones de la Gaceta de la Paz: clic acá

El nuevo escenario de “posconflicto” con el ELN

La Fiscalía confirmó este sábado que se expidieron las órdenes de captura en contra de los miembros del Comando Central (Coce), máxima instancia del ELN, por su responsabilidad en el atentado contra de la Escuela General Santander de la Policía, el pasado 17 de enero.[1] La reciente ruptura de las negociaciones de paz con este grupo subversivo, ordenada por el presidente Iván Duque, pone de nuevo al país en un escenario de confrontación total con esta fuerza insurgente.

De hecho, la confrontación abierta con el ELN puede representar una grave amenaza para las regiones. Por ejemplo, un informe publicado por International Crisis Group revela que entre 2017 y el primer semestre de 2018, el accionar bélico de esta guerrilla se registró en 118 municipios, lo que equivale a decir que uno de cada 10 se vio afectado por el conflicto armado con los ‘elenos’.[2]

En este sentido, Vichada, norte del Chocó, sur y centro del Cesar, norte del Cauca y sur del Valle fueron los departamentos que sufrieron la expansión territorial de la guerrilla del ELN, tras la salida de las FARC. Sin embargo, a diferencia de otros grupos ilegales, la expansión de esta insurgencia ha sido más lenta, a raíz de que la guerrilla no cuenta con el apoyo de los civiles. “Lograr esto implica años. Otros grupos al margen de la ley resuelven esto pagando y amedrentando a los campesinos y comunidades”, indica un informe de la Fundación Paz y Reconciliación.[3]

La preocupación que surge y en la que los analistas coinciden es que al romperse las negociaciones el grupo subversivo incrementará sus acciones para demostrar capacidad de desestabilización. El problema radica en que los más afectados serán las comunidades rurales que habitan en zonas donde el ELN tiene influencia.[4]

No obstante, los analistas afirman que la confrontación con el ELN no requiere la misma producción de violencia que implicó el debilitamiento de la extinta FARC, y esto se debe a tres elementos:

  1. Es una guerrilla más pequeña en términos numéricos y tiene presencia en menos territorios.
  2. Su capacidad bélica es mucho menor que la de las FARC al momento de negociar.
  3. Cuenta con menos recursos logísticos y financieros que le dificultan recuperarse de los golpes de la Fuerza Pública o de cualquier actor armado.

Empero, la táctica de guerra del ELN implica un reto particular al Estado, pues se trata de una clásica guerra de guerrillas. Por un lado, los combatientes el ELN ponen en práctica la idea de combatiente-militante: “militante en el día y combatiente en la noche”. Esto pone en riesgo a la población civil, pues el ELN busca camuflarse entre los campesinos. Por otro lado, la guerrilla trata de evitar enfrentamientos abiertos, pues tiene claridad sobre la superioridad militar de la Fuerza Pública; en cambio, pondera golpes cortos pero contundentes (francotirador, artefacto explosivo, hostigamiento o emboscada).[5]

Adicionalmente, si algo queda claro es que el ELN ha intentado sabotear la paz pactada con las FARC. En los dos años que lleva la implementación del Acuerdo de Paz, la guerrilla del ELN ha puesto varias piedras en el camino: en algunos casos saboteando los planes de sustitución de cultivos –como en Catatumbo–  o en otros asesinando a excombatientes de las FARC, hiriendo el corazón del proceso de construcción de paz.[6]

La JEP sigue avanzando en procesos complejos y prominentes  

En esta semana la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) se enfrentó a varias decisiones complejas. Para comenzar, llamó a rendir versiones voluntarias. En este caso a 11 exguerrilleros de las FARC, quienes deberán dar explicaciones sobre el Caso 002, que prioriza las violaciones a los Derechos Humanos y al Derecho Internacional en los municipios de Tumaco, Barbacoas y Ricaurte, en Nariño, entre 1990 y 2016.[7]

Por otro lado, la Sala de Reconocimiento confirmó la práctica de pruebas que había decretado en el incidente de verificación de cumplimiento que le abrió a alias El Paisa. Los magistrados desestimaron una solicitud del defensor de oficio, quien alegaba que la JEP no podía tener pruebas provenientes de inteligencia de los organismos del Estado. En ese sentido, le ordenaron al Ministerio de Defensa Nacional que entregue información sobre el posible reagrupamiento y retoma de armas de las estructuras que operaban bajo el mando de El Paisa.[8]

Asimismo, la JEP decidió seguir adelante con el estudio de la garantía de no extradición de Jesús Santrich, tras no recibir de las autoridades de Estados Unidos las pruebas que lo comprometen en un presunto envío de cocaína a ese país. A partir de ahora, las partes tendrán cinco días hábiles para presentar sus argumentos para defender su posición. Una vez surtido ese término, la Sección tendrá que decidir si le concede o no la garantía de no extradición al exjefe guerrillero.[9]

Por último, esta jurisdicción ordenó la libertad condicional de Anayibe Rojas Valderrama. Sonia, como se le conocía en la guerrillera, era una de las figuras de más alto rango de las FARC extraditada a los Estados Unidos. Apenas llegó, la exguerrillera fue enviada a la cárcel El Buen Pastor, para que respondiera por los cargos de lavado de activos que tenía pendientes en el país. Ella, que estaba en las listas de combatientes que entregó la guerrilla en medio del acuerdo de paz, quedó a disposición de la JEP, es decir, aún tiene que saldar cuentas y rendir declaraciones ante este tribunal.[10]

“El rechazo a la violencia en Colombia, es fruto de la paz”: jefe de la Misión de la ONU

Ante los países miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, Carlos Ruíz Massieu, jefe de la Misión de la ONU en Colombia, hizo un completo balance sobre cómo avanza la implementación del acuerdo de paz con las FARC. El informe de Ruíz Massieu giró en torno a cuatro puntos que son de vital importancia para alcanzar una paz completa:

Mantener la independencia y autonomía de la JEP; darle continuidad a la reincorporación de excombatientes después de la expiración de los ETCR; garantizar la seguridad de los miembros del partido FARC en su participación en las elecciones regionales; además de priorizar la atención al fenómeno sistemático de asesinato de líderes sociales, así como de excombatientes de FARC.[11]

Asimismo, en referencia al rechazo generalizado al atentado contra la Escuela de Policía General Santander, Ruíz Massieu declaró: “[…] los colombianos demostraron su consenso cada vez más amplio en torno al rechazo de la violencia, el cual se ha destacado en los informes del Secretario General como uno de los frutos de la paz.  Este consenso se debe seguir fomentando”.[12]

Por su parte, el presidente del Consejo de Seguridad de la ONU, Miguel Vargas Maldonado hizo un llamado al Gobierno Nacional para que intente retomar los diálogos con el ELN: “[…] reconocemos los problemas que lo obstaculizan. No obstante, exhortamos a ambas partes a encarar el posible reinicio de las negociaciones de paz con la flexibilidad necesaria para lograr el objetivo deseado”.[13]

Entrevista. “Entender la paz como derecho síntesis”: Iván Márquez[14]

El exjefe negociador de las FARC, Luciano Marín, habló desde la clandestinidad sobre el futuro del proceso de paz, la desfiguración que ha realizado el nuevo Gobierno al Acuerdo Final y su compromiso con la JEP, entre otros temas espinosos.

La JEP lo citó personalmente para el próximo 14 de marzo con el fin de que entregue su versión voluntaria en el caso 001, que indaga sobre secuestros, asesinatos y desapariciones forzadas durante el conflicto. Al respecto afirmó: “Todos los involucrados en el conflicto deben aportar verdad a través de los mecanismos convenidos y no de los ideados por el capricho unilateral de un alto dignatario que cree que los acuerdos pueden ser modificados a su parecer. La verdad se aporta de manera colectiva, a través de abogados o de un escrito. Y esto es válido para la cúpula política que emitió órdenes, para los terceros involucrados o agentes civiles del Estado, los partidos, los ganaderos, los empresarios que han financiado al paramilitarismo […]”.

Asimismo, para aquello que se preguntan por el paradero y accionar de Iván Márquez, el exjefe negociador indicó: “Estoy construyendo el relato de mis percepciones sobre el proceso de paz, recogiendo el sentir de la base guerrillera y de varios mandos. Nunca Colombia había estado tan cerca del fin de la rebelión armada o su apaciguamiento a través de una negociación. Pero, desgraciadamente, una intolerancia desadaptada frente a los cambios positivos y, sobre todo, el analfabetismo de algunos soberbios que aún no logran entender la paz como derecho síntesis, tienen al borde del fracaso el esfuerzo extraordinario de La Habana”.

Valle del Cauca y Cauca, en alto riesgo por incremento de la violencia

La Defensoría del Pueblo emitió simultáneamente tres alertas tempranas de inminencia el pasado miércoles, describiendo los escenarios de posibles vulneraciones de derechos humanos que afrontan los habitantes de Buenaventura, Jamundí y Bolívar. En estos documentos, se les hace un llamado a entidades estatales del orden local, regional y nacional para que tomen medidas que mitiguen las amenazas descritas y no ocurran más tragedias.[15]

Por otro lado, el sábado duraron más de 24 horas los enfrentamientos entre grupos armados ilegales en zona rural del municipio de Corinto, departamento de Cauca. Las estructuras armadas de las disidencias de las FARC y del EPL sostuvieron un combate que, aunque no se conoce si dejó víctimas, si causó gran temor entre los habitantes de las veredas El Crucero, La Laguna y Quebradita, quienes tuvieron que resguardarse en sus casas para evitar los proyectiles.[16]

Asimismo, el martes se confirmó el secuestro de la vicepresidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Crucero La Secreta, zona rural de este municipio. Antes de este hecho, dos personas, que serían disidentes de las FARC, fueron torturadas y luego asesinadas, en la vereda de San Pedro, ubicada a 40 minutos del casco urbano de esta localidad.[17]

Líderes sociales de María La Baja, en zozobra constante[18]

En María La Baja hay preocupación. Allí, a dos horas de la turística Cartagena, las comunidades rurales que reclaman la restitución de tierras, la reparación colectiva y exigen acceso y calidad al agua, están bajo riesgo.

En reacción a ese estado de zozobra, la Defensoría del Pueblo emitió el pasado 9 de enero una alerta temprana que advierte sobre la vulnerabilidad a la que están expuestos los líderes sociales de este municipio de Bolívar por la acción de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC).

Según el informe de esta agencia del Ministerio Público, esa banda criminal consolidó su presencia en este municipio en 2015, después de una disputa territorial con Los Paisas y Los Rastrojos. Su interés es el de explotar los corredores geoestratégicos para el tráfico de armas y de estupefacientes producidos en la Serranía de San Lucas, el sur de Bolívar, Sucre, el Noreste y Bajo Cauca antioqueño. Desde hace tres años, ese grupo armado ilegal está relacionado con las amenazas a comunidades campesinas y étnicas que reclaman sus derechos.

¿Qué significa que Colombia encabece la Comisión de Consolidación de la Paz de la ONU?[19]

Desde este lunes Colombia encabeza la Comisión de Consolidación de la Paz de las Naciones Unidas. El embajador Guillermo Fernández de Soto fue elegido como presidente del órgano por aclamación. Colombia fue el único país que postuló a su embajador como candidato para este cargo, por lo tanto, fue elegido por unanimidad. Antes la presidencia estaba a cargo de Rumania.

La principal tarea de la comisión es apoyar los esfuerzos de los Estados Miembros de la ONU, las agencias y los mecanismos de la ONU para lograr una paz sostenible en los países en donde hay o hubo conflicto.

Tras el proceso de paz con las FARC, Colombia es un referente en la resolución de conflictos, y justamente el país pasa por la etapa de posconflicto. Según la Cancillería, la idea de presidir la comisión parte de “compartir las lecciones aprendidas y los retos del esfuerzo que ha hecho el país, que se ve reflejado en la política del presidente Duque Paz con Legalidad de transformar las regiones más afectadas por la violencia y de prevenir nuevos conflictos”.

La UNP se declara en huelga: ¿Quién va a defender a los líderes sociales?[20]

Los trabajadores de la Unidad Nacional de Protección (UNP) se declararon en huelga. Varios sindicatos de empleados de esta institución gubernamental dijeron que no están dispuestos a trabajar hasta que no se cumplan sus exigencias: condiciones laborales favorables, “sueldos justos” y hasta que “saquen la corrupción de la UNP”.

Esta institución se encuentra en un momento crítico, pero esto no quiere decir que sus problemas sean nuevos. Desde 2014 se supo que la UNP tuvo desfalcos millonarios y hechos de corrupción por parte de sus funcionarios. Andrés Villamizar, por ejemplo, dirigió la UNP hasta 2015 y ahora es investigado por la Procuraduría acusado de presuntos hechos de corrupción.

Lo que ha salido en los medios hasta ahora da cuenta de irregularidades en la adjudicación de contratos por parte de la UNP. La institución es la encargada de la protección de los colombianos en riesgo, pero no cuenta con los recursos suficientes para poder asignar esquemas a todos quienes los solicitan. En este punto tercerizan el “servicio”, y es aquí donde se han registrado casos de corrupción y, a futuro, se puede generar practicas riesgosas que van en contravía de la protección de líderes sociales y defensores de derechos humanos.

Fuentes

Pacifista disponible en: https://pacifista.tv/

Semana disponible en: https://www.semana.com/

La Silla vacía disponible en: https://lasillavacia.com/

El Tiempo disponible en: https://www.eltiempo.com/

Verdad Abierta disponible en: https://verdadabierta.com/

El Colombiano disponible en: http://www.elcolombiano.com/

El Espectador disponible en: https://www.elespectador.com/noticias

Fundación Paz y Reconciliación disponible en:  https://pares.com.co/

Misión de Verificación de la ONU en Colombia disponible en: https://colombia.unmissions.org/