Elsis Valencia, pionera y profesora de la cocina tradicional del Pacífico en el Valle del Cauca, se ha convertido en amiga, hermana y madre de diversas mujeres afrocolombianas que han migrado desde territorios como Guapi, Timbiquí, Barbacoas, Buenaventura y Quibdó, en busca de nuevas oportunidades para mejorar su calidad de vida o como medida de seguridad en casos de violencia. 

Al igual que Elsis, más de 24 lideresas en Cali se han unido, para recordarse mutuamente el valor que tienen como mujeres y portadoras de tradición y sobre todo, para apropiarse del proceso de resignificar la cocina tradicional del pacífico. Esta comunidad de portadoras de tradición gastronómica fueron las invitadas especiales al cierre del proyecto “saberes y sabores”.

La jornada inició con una activación de cocina en vivo, en la que Mercedes Bazan, Lida Venté y Elsis Valencia explicaron el paso a paso acerca de como se cocina un tamal de piangua en el litoral, espacio en el que compartieron secretos como la importancia de hervir y engrasar la hoja de plátano con la que se realiza este plato para poder que no se pegue la masa y se pueda moldear mejor. 

La tarde se desenvolvió en medio de 2 conversatorios acerca de la caracterización de la cocina negra en Cali, las estrategias de visibilización para esta, y, las experiencias y significados que tuvo el proyecto “Saberes y sabores negros de Santiago de Cali” para las portadoras de tradición. Este espacio de conversación contó con la participación de representantes del Programa Inclusión para la Paz de USAID implementado por OIM, Ministerio de Cultura y la Escuela Taller Cali.

En medio de cantos, baile y una que otra broma, al finalizar la jornada se vivió una sesión de degustación y cata de bebidas tradicionales en la que los asistentes al evento pudieron intercambiar, comprar y conocer más sobre las y los emprendedores beneficiados. 

Estas lideresas han dedicado más de 30, 34 y 39 años de su vida a crear deliciosos platos, brindando conocimientos y reviviendo los encuentros, celebraciones y tradiciones del Pacífico en torno de la cocina tradicional. Con esperanza Marina Cetre, sabedora de la cocina expresa, “vienen muchos retos ¿sabe? queremos organizarnos más, tenemos mucho valor y ahora lo sabemos, por eso queremos una fundación, una casa, un refugio para nosotras, en el que podamos crear y enseñar a todo el que quiera nuestro pacífico. Queremos mejores condiciones de trabajo, que todo sea bajo normas de salud, con seguridad social para todas, mejor dicho, lo que tenemos es camino y estamos listas para iniciar”.