En virtud de su mandato, la OIM ha implementado época tras época en Colombia, diferentes programas que se han ajustado al contexto del país a través de los años. Como Organización Intergubernamental, consagrada al principio de que la migración en forma ordenada y en condiciones humanas dignas beneficia tanto a los migrantes como a la sociedad, ha trabajado de la mano con el gobierno de Colombia para la creación de planes y estrategias que conlleven a solucionar las diferentes problemáticas sociales que se han ido presentando con el tiempo.

En 1956, cuando se dio su creación en Colombia, el Comité Intergubernamental para las Migraciones Europeas, CIME, implementó la asistencia a los refugiados europeos que llegaron a Colombia.

Posteriormente, en la década del 60, actuando en el marco de Migración y Desarrollo, surgió la iniciativa gubernamental de tener en los diferentes campos empresariales y productivos del país, Técnicos Especializados extranjeros que implementaran nuevos métodos para la producción y que capacitaran a colombianos en diferentes instituciones como el Servicio Nacional de Aprendizaje- SENA. El CIME apoyó esta iniciativa con el traslado de los migrantes y su ubicación.

Asimismo, en la década del 70, el CIME puso en marcha el programa de Migración Selectiva, que consistía en vincular personal altamente calificado de cualquier país europeo para realizar labores específicas en diferentes empresas en Colombia. Este Programa fue ejecutado hasta la década del 80.

En los años 80, el programa Retorno de Talentos, fue implementado para cooperar con el regreso de colombianos a su país provenientes de Europa, que hubiesen finalizado alguna clase de estudios superiores.

Mediante este programa retornó el colombiano Jaime Urdinola, proveniente de Alemania, quien además recibió la mención a su regreso de ser el migrante número tres millones de la Organización. 

En la misma década se implementó en coordinación con el Gobierno de la República Federal Alemana, el programa LARAP (Latin American Reintegration Assitance Programme), cuyo fin consistía en vincular a procesos empresariales, académicos e investigativos específicos, personas colombianas que hubiesen sido capacitadas en Alemania.

En los 90 con el fin de brindar un descuento en el tiquete a las personas que salen a realizar estudios en el exterior se implementó el programa de Becarios, que hasta la fecha sigue funcionando, además con la ayuda del gobierno alemán en la misma década, se trasladaron varios ciudadanos de ese país hacia Colombia para proporcionar a instituciones personal especializado para el desempeño de cargos relevantes en el marco de la política de desarrollo que el gobierno nacional estaba ejecutando en diferentes campos en el país. Este programa denominado Expertos Integrados, culminó a finales del año 2000.

De esta manera, la Organización Internacional para las Migraciones, ha proporcionado asistencia técnica al gobierno colombiano para asistir a la población mediante la implementación de programas que se enmarcan dentro de sus áreas de trabajo: Migración y Desarrollo, Migración Facilitada, Migración Forzada y Reglamentación de la Migración.

Desde el 2000, a través de sus oficinas en todo el país, la OIM centró la asistencia técnica en ayudar al gobierno de Colombia a abordar los desafíos migratorios originados por el conflicto armado. En gran medida, se dio inicio a la implementación de programas para mitigar el impacto del desplazamiento forzado interno, promover los derechos de los desplazados y asistir a las autoridades regionales y locales.

De igual forma la Organización apoyó al Gobierno en el proceso de reintegración de excombatientes desde la desmovilización a gran escala de los paramilitares en 2003. También se ha ayudado al Gobierno a reintegrar a los niños soldados que han escapado o han sido rescatados de grupos armados ilegales en los últimos 15 años. En este sentido, la OIM tiene un papel importante a desempeñar en el proceso de reincorporación de las FARC-EP.

Se ha venido fortaleciendo instituciones que implementan reparaciones a víctimas del conflicto durante casi 5 años. El proceso de paz con las FARC trae consigo nuevos desafíos para las víctimas y el gobierno, por ejemplo, para asegurar que las víctimas permanezcan en la agenda nacional y no sean "invisibilizadas", La OIM ha venido trabajado con la Unidad de Víctimas y otros socios para asegurarse que las víctimas que viven en las mismas zonas donde se encuentran los desmovilizados de las FARC que se encuentran en proceso de reintegración reciban reparaciones. También ha estado trabajando para crear capacidad institucional a las nuevas entidades creadas tras la firma del acuerdo de paz. 

En los últimos años, la OIM ha adelantado estrategias para involucrar al sector privado a través de la implementación de dos enfoques de trabajo: i) migración inducida por proyectos minero-energéticos, e ii) innovación tecnológica.

Finalmente, a partir de esta década se han desarrollado nuevas áreas de trabajo en torno a la Trata de Personas para asistir, prevenir, fortalecer y sensibilizar a las víctimas de este flagelo; infraestructura educativa; migración laboral; apoyo al fortalecimiento institucional para abordar las necesidades de las poblaciones étnicas y reducir las vulnerabilidades de esta población; y promover el desarrollo rural en el regiones priorizadas por las acciones de la Organización.